En Nueva York
tuvimos un invierno raro, sin nieve y
con altas temperaturas. Es posible que abril nos traiga una nevada sorpresa,
pero sería la última. La primavera asoma ya en brotes de árboles y retoños en macizos
de flores. Hora es pues de pensar qué perfume adquirir para esta temporada y
los idóneos son los de Vera Wang.
Decir “Vera Wang”
es decir tantas cosas. Mas que nada es destruir estereotipos sobre la mujer del
Lejano Oriente. Hija de una adinerada pareja de inmigrantes chinos, tuvo una
infancia privilegiada. Asistió a buenas escuelas, incluyendo Chapin, la escuela
elite de señoritas, donde estudiaron
desde Jackie Kennedy hasta Ivanka Trump. Se puede decir que Vera Wang es más
Blair Waldorf que Awkwafina. Por lo que se entiende que haya diseñado el
vestido de Blair cuando se convirtió en Princesa de Mónaco y que la diseñadora haya
hecho un cameo en Gossip Girl.
Aunque su sueño
original fue ser patinadora de hielo, su interés en las artes prevaleció. Graduada
de universidades extranjeras y estadounidense, ha sido la editora de Vogue
más joven de la historia. Comenzó su carrera en la alta costura y pronto se
hizo conocida con sus diseños de vestidos de boda para las ricas y famosas. Por
su atelier han desfilado celebridades como Victoria Beckham, Ivanka y Kim
Kardashian.
A comienzos de
siglo, con ya un nombre en el rubro de
la moda, decidió embarcarse en la industria del perfume. De su galería destacan
tres aromas que son perfectos para esta época en que todo florece. El primer
perfume lleva el sencillo nombre de Vera Wang. Nacido en el 2003, ya es mayor
de edad. Es un floral suave apropiado para toda edad, menos para las alérgicas
a la gardenia como Servidora. Este aroma es creación de Harry Fremont y Jean
Claude Deville.
En el 2006, la
diseñadora aprueba dar su nombre a Princess, su aroma más conocido y producto
de las narices de Harry Fremont y Ilias Ermenidis. Se trata de la encarnación perfumada
de las Princesas Disney, por lo que es adecuado solo para jovencitas en edad
escolar y para veinteañeras soñadoras y románticas (todavía las hay) ya que es
un perfume muy dulce casi infantil que recuerda a algodón azucarado. Eso se
debe a que entre sus ingredientes se cuentan el chocolate, el pastel de
vainilla, y la azúcar.
Mi favorito y que
me está acompañando en esta primavera en que mi cuerpo todavía no encuentra el
equilibrio, es Embrace. La Señora Wang ha usado el nombre para una colección de
colonias que contienen combinaciones de olores de flores. El primero es el que estoy
usando esta primavera y dice llamarse “Periwinkle &Iris”.
Digo “dice”
porque el iris es una planta liliácea sin aroma y periwinkle es lo que
en español conocemos como vinca o violeta silvestre, una especie de maleza que
tampoco posee olor. ¿Entonces en que consiste este perfume? Pues en gran medida
en una nota alta de violeta, con tonos bajos de vainilla y la infaltable azúcar
fina.
Por suerte se ha
matizado esta mezcla dulzona con dos notas altas cítricas: aceites de bergamota
y de mandarina. Para quien no guste de los cítricos, tanto la bergamota como la
mandarina son de fragancia delicada. De esa manera el perfumista consigue un aroma
terso, fresco que, según usuarios, y concuerdo
con ellos, tiene un efecto calmante
En mi oferta de
perfumes invernales les conté que la vainilla es un ingrediente idóneo para
entrar en calor en días nevados, pues también puede acompañarlos en esos días ambiguos
de la primavera en los que todavía nos enfundamos en botas y abrigos. Por eso
les recomiendo un estupendo Perfume del Ayer, Vanilla Fields de Coty.
Nacido hace 30
años, yo lo compré apenas salido al mercado. Coty es una marca que me ha acompañado toda la vida,
pero este producto me defraudó. No olía a vainilla, era una combinación maderera,
ambarina, con una gran dosis de aceite
esencial de geranio. Es esa combinación que todavía encuentro si me lo aplico
sin haberme bañado y que los usuarios se quejan huele a gasolina Diesel o a
producto para encerar el piso.
Tranquilos, si se
lo ponen después del baño y, como siempre recomiendo, lo aplican más a la ropa
que al cuerpo al rato emerge la vainilla acompañada de notas altas de coco,
pero siempre equilibradas de sándalo y cedro de Virginia que le dan un toque exótico,
pero adecuado a temperaturas
intermedias.
Como hemos tenido
un invierno que no parece tal, se predice que el verano será muy caluroso y que
llegará antes de lo esperado. Eso podría indicar un mayo extra cálido. Si tal
cosa ocurriese debemos pensar también en aromas primaverales, pero para días de
calor.
Mi primera
recomendación recae en un producto que ya mencioné anteriormente en mi entrada
sobre la perfumería de Elizabeth Arden, me refiero al legendario Blue Grass. En su última
reformula, este perfume verde resulta muy refrescante para días primaverales
que se sienten como de verano.
Otro para días
calurosos es el humilde, pero potente Sparkling Pink Grapefruit de Parfums de
Coeur. A las que le disgusten los cítricos,
les recuerdo que el pomelo rosado tiene
un aroma más delicado que la mayoría de las toronjas . Aquí se le ha combinado
con otro aroma frutal exótico y sensual, la granada con nota baja de vainilla y
medias de jazmín y agua de rosas. El resultado es refrescante y enloquecedor.
¿Qué perfumes
recomiendas para la primavera?
No hay comentarios:
Publicar un comentario