¿Qué mujer
moderna no ha usado algún producto Lancome sea pintalabios, mascara de ojos o
una de sus famosas cremas antiarrugas? Aunque es más conocida por sus
cosméticos, se sabe que Lancome también produce perfumes, que un día tuvieron
un buen precio y hoy cuestan un ojo de la cara. Me ha sorprendido saber que
Lancome nació como perfumería. Vamos a conocer su historia.
Fue en Paris, en
1935 que Guillaume D’Ornano y su socio Armand PetiteJean, un ex perfumero de
Coty abrió las puertas de la firma Lancome. El nombre nació de las ruinas del
Castillo de Lancome en el centro de Francia. Las rosas que rodeaban Lancome le
sugirieron a Elizabeth, la esposa de D’Ornano, el que hasta hoy es símbolo de
la casa, la rosa.
Ese mismo año,
Lancome enviaba la Feria Mundial de Bruselas cinco aromas distintivos que me
temo ya no están con nosotros. Tropique, Conquete, Tendré Nuit, Bocages y
Kypre. Creados por Armand Petijean fueron en su mayoría florales.
En 1936, Lancome sacaba
al mercado su crema Nutrix, todavía en venta y encaminaba a la firma a convertirse
en un imperio de los cosméticos. Los perfumes fueron postergados, aunque seguirían
produciéndose.
No recuerdo haber
visto productos Lancome en la colección de mi madre, por lo que no los creo muy
famosos. El primer aroma Lancome que conocí fue el aun existente O (1969), que
a pesar de su bello envase de cristal verde no pasa de ser un cítrico más.
Para la fecha de creación
de O, Lancome se había fusionado con otro importante fabricante de productos de
belleza, L’Oreal. De las fragancia post
fusión, una de las más recordadas y todavía producidas marcas es Magic Noir. Este
perfume de 1978 es fuerte, muy ochentero y recuerda tanto a Paloma Picasso como
a la Diva de Ungaro. Otras fragancias famosas
fueron Climat (1967), una imitación de Madame Rochas y Sikkim (1971) un perfume
fuerte que recuerda a Aramis.
Aunque Lancome se
ufanaba desde sus comienzos que no necesitaba grandes campañas de mercadeo,
otra canción cantaba a finales de siglo. Fue en 1981 que contrataron como
exclusivas de Lancome la cara y figura de Isabella Rosellini. La hija de Ingrid
Bergman seria la embajadora de Lancome por 20 años y alcanzaría la década más
perfumada de la firma apareciendo en los spots de la mejor fragancia de esta:
Tresor
En 1952, Lancome lanzaba
al mercado su primer “Tesoro”, en un frasco llamativo, un pomo de cristal
cortad,. No sé a qué olería, pero la versión famosa la inventó en 1990, Sofia
Grosjam. El primer whiff era lirio del valle y rosa, nada muy
particular, pero si se esperaba un poco aparecía una sensación de estar bajo un
melocotón en flor.
Lamentablemente
Tresor es tan popular que ha sufrido dos reformulas, solo en la primera década
de este siglo. Yo tengo la del 2004: rosa, lila y vainilla. Agradable, ¿pero ¿dónde
quedó el durazno? Lo que si conserva es
esa botella de extraña forma y diseño escalonado. Algo que se usó para los peldaños
por los que asciende Isabella Rosellini en el primer video comercial del perfume
en 1991.
Aunque se han
hecho derivados del Tresor para llenar una perfumería, el que, recomiendo, si
les gustan los frutales es Tresor Midnight Rose. Casi no se siente la rosa en
este aroma del 2011 que ha promovido Emma Watson, es frambuesa, ahogada con cassis
(grosella) y con un toque de pimienta. Fragancia perfecta para Hermione Granger.
Juliette Binoche sería
otro rostro famoso a servicio de Lancome promocionando Poeme de 1995. Agradezco
públicamente a mi tía Cristina Dittborn por haberme traído un frascote gordo de
Poeme desde Chile porque aquí anda en precios prohibitivos. Jacques Cavallier supo
crear un perfume muy suave y elegante como los clásicos.
Es la primera vez
que noto el olor a cuero de Poeme, un cuero limpio como el de un asiento de un
salón de té en el que recién se ha sentado una dama perfumada de azahar. Como
muchos han notado, Poeme es una batalla
entre flores amarillas (mimosa, Ylang-ylang) y blancas (fresia, azahar, jazmín).
Lo divertido es que nus notas altas incluyen dos plantas que no tienen aroma:
amapola del Himalaya y el floripondio.
En el 2000 sale
al mercado, Miracle, un verdadero milagro de la perfumería moderna. Creado por
Alberto Morilla y Harry Fremont se trata de un floral con especias ¡y vaya que
especias. Es un perfume que “pica” con sus notas de pimienta y jengibre sobre
un fondo de fresia blanca y el desiderátum de lo exótico, lichi.
Si, la próxima vez que vayan un restaurante chino, ordenen lichis de postre, espolvoreen pimienta sobre esta fruta y huélanlo. Ahí tendrán Miracle que es intenso y fresco a la vez, con una medida exacta de dulzura. Miracle ha sido promocionado por Diane Kruger y Uma Thurman
Lancome ha
seguido creando olores finos para damas en este siglo. Si voy a escoger un
favorito será La Vie est Belle (2013) promocionado por Julia Roberts. Olivier
Polge, Dominique Ropion y Anne Flipo revivieron el antiguo aroma de 1949 y lo
convirtieron en un exceso de dulzor: peras en almíbar, almendras garrapiñadas y
un toque de vainilla. No es para todo el mundo, pero que delicia olerlo.
Idole es la última
contribución antes que la pandemia llegase a apagar negocios y olfatos.
Promovido por Zendaya, este aroma del 2019 tiene como característica mayor una
botella plana y delgada, casi imposible de parar verticalmente que recuerda una
petaca de licor. El perfume es típico Lancome, fruta, vainilla, rosa.
Los perfumes
Lancome son para todos los gustos y acaparan el mercado. recuérdenlos si se les ha quedado un regalo por hacer. En Amazon están ofreciendo estuches de
miniaturas por menos de $50.
Aprovecho esta
entrada para desear una muy feliz Navidad a todas mis Latinas de Ayer.